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Descubrimiento de las inscripciones simbólicas más antiguas en el Levante

Un estudio reciente publicado en la revista Archaeological and Anthropological Sciences revela que los primeros humanos en el Levante practicaban el comportamiento simbólico mucho antes de lo que se pensaba.

Investigadores de Israel, Alemania, Estados Unidos y Portugal, entre ellos la Dra. Mae Goder-Goldberger de la Universidad Hebrea y la Universidad Ben Gurion, y el Dr. João Marreiros del Centro de Investigación Arqueológica Monrepos y del ICArEHB de la Universidad del Algarve, analizaron cinco artefactos grabados procedentes de sitios arqueológicos del Levante. Entre estos se encuentran la Cueva de Manot, la Cueva de Qafzeh, Quneitra y la Cueva de Amud, con objetos que datan de entre 100,000 y 40,000 años atrás.

Utilizando un análisis de superficie en 3D, los investigadores lograron diferenciar las incisiones con patrones geométricos de aquellas marcas generadas por el uso funcional de herramientas. Los resultados demuestran que los grabados fueron realizados de forma intencional, lo que sugiere una capacidad de pensamiento abstracto en estas sociedades prehistóricas.

Evidencia de pensamiento abstracto en sociedades antiguas

“El pensamiento abstracto es un pilar de la evolución cognitiva humana. Los grabados deliberados en estos artefactos reflejan una capacidad de expresión simbólica y sugieren una sociedad con habilidades conceptuales avanzadas”, afirmó la Dra. Mae Goder-Goldberger.

Los objetos de la Cueva de Qafzeh, con una antigüedad estimada entre 100,000 y 90,000 años, muestran inscripciones intencionales asociadas con los primeros humanos modernos. Estos hallazgos desafían la creencia de que el comportamiento simbólico solo surgió tras la expansión global del Homo sapiens. Asimismo, los artefactos de Quneitra, con unos 54,000 años de antigüedad, y los de la Cueva de Manot, datados entre 50,000 y 40,000 años atrás, exhiben patrones alineados con las superficies naturales de las piedras.

En contraste, las incisiones encontradas en la Cueva de Amud son poco profundas, irregulares y parecen responder a un uso funcional más que a un propósito simbólico. Esta cueva, ocupada entre 70,000 y 50,000 años atrás, se asocia principalmente con los neandertales. Las diferencias entre los artefactos de estos sitios resaltan la importancia de los grabados hallados en Qafzeh, Quneitra y Manot.

Un nuevo enfoque para el estudio de grabados prehistóricos

“Esta metodología no solo confirma la naturaleza intencional de los grabados, sino que también proporciona un marco comparativo para el análisis de artefactos similares, enriqueciendo nuestra comprensión de las sociedades del Paleolítico Medio”, explicó el Dr. Marreiros.

Hasta ahora, la intención detrás de las inscripciones en piedras del Paleolítico Medio había sido aceptada sin un respaldo empírico sólido. Muchos arqueólogos consideraban estas marcas como resultado del uso de herramientas o del desgaste natural.

El estudio, realizado en colaboración con la profesora Erella Hovers de la Universidad Hebrea y el Dr. Eduardo Paixão del ICArEHB de la Universidad del Algarve, destaca que, aunque los artefactos grabados de Qafzeh, Quneitra y Manot parecen casos aislados en sus respectivos contextos temporales y geográficos, los patrones compartidos sugieren acciones intencionales y premeditadas.

Estos hallazgos reafirman que el pensamiento simbólico y la expresión abstracta surgieron mucho antes de lo que se creía en las primeras sociedades humanas del Levante.